Ir a los conciertos de Radio•3 siempre es un poco raro. El sitio, los horarios, el ambiente… un poco frío, vamos.
Llegamos el día anterior, Miguel y Javi llevaban varios días en Madrid haciendo promoción, tenían cara de cansados cuando los vi en el hotel.
Esa misma noche vimos por primera vez físicamente los discos de “A la hora del Sol” y, por supuesto, lo celebramos. A la vuelta rodamos unos videos “promocionales” en la habitación que algún día saldrán a la luz…o no...Creo que más bien no, psicodelia-infame, no podía parar de reírme.
Al día siguiente seguía lloviendo, había sueño. Aún así ibamos con muchas ganas, las canciones en directo están sonando geniales, estabamos impacientes.
Llegamos al plató y en medio del escenario estaba el piano de cola que habíamos conseguido para César!!!!. Un hombre lo afinaba meticulosamente. A mí siempre me han llamado la atención los afinadores de pianos, me quedo mirándolos como un niño, van tocando y retocando con la mirada perdida, me causan curiosidad, parecen todos buena gente...me los imagino en sus casas perfectamente ordenadas.
Llegamos el día anterior, Miguel y Javi llevaban varios días en Madrid haciendo promoción, tenían cara de cansados cuando los vi en el hotel.
Esa misma noche vimos por primera vez físicamente los discos de “A la hora del Sol” y, por supuesto, lo celebramos. A la vuelta rodamos unos videos “promocionales” en la habitación que algún día saldrán a la luz…o no...Creo que más bien no, psicodelia-infame, no podía parar de reírme.
Al día siguiente seguía lloviendo, había sueño. Aún así ibamos con muchas ganas, las canciones en directo están sonando geniales, estabamos impacientes.
Llegamos al plató y en medio del escenario estaba el piano de cola que habíamos conseguido para César!!!!. Un hombre lo afinaba meticulosamente. A mí siempre me han llamado la atención los afinadores de pianos, me quedo mirándolos como un niño, van tocando y retocando con la mirada perdida, me causan curiosidad, parecen todos buena gente...me los imagino en sus casas perfectamente ordenadas.
Todos mirábamos el set de César…le faltaba la capa para ser Rick Wakeman!, ya lo vereis.
Tuvimos que dejar algunas canciones del disco fuera, nos costó decidirnos. Al final del concierto grabamos una versión del Wishfull Sinfull de los Doors para no se qué movida que harán los de Radio•3.
Lo pasamos muy bien tocando, se nos hizo un poco corto, allí es fácil entrar en calor, hay muchos focos, una iluminación chulísima. En el escenario se suda, y eso siempre es bueno.
A mi me distraía el público, siempre me pasa. Les delimitan un espacio rectangular del cual no pueden salirse…parecen las bateas de soldaditos que venden en las jugueterías, algunos intentaban dar palmas, otro hacía gestos de tocar la guitarra pero mirando de soslayo el limite imaginario que le había marcado un chico vestido con aspecto de vendedor del corte inglés, ese mismo que nos seguía a todos sitios todavía no se para qué… En fin, el público creo que también lo pasó muy bien, en su batea.
Nos dijeron si queríamos subir al control a escuchar antes de desmontar, pero no hizo falta, nos quedamos satisfechos, sudados y satisfechos, para que escuchar?! Lo veremos el jueves
Fabíán Romero nos hizo como de costumbre el sonido y las fotos, amazing!!
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